Remedio casero para eliminar los hongos de los pies
Remedio casero para eliminar los hongos de los pies
Hola amigas y amigos. Mirad: Hoy vamos a hablar de los hongos en los pies, del famoso “pie de atleta”.
Cuando hablamos de problemas relacionados con la salud, hay que poner las cosas siempre en su lugar y ser muy conscientes de cuando sí podemos aplicar remedios caseros y cuando no. Así que me vais a permitir que que antes de empezar a contaros ese remedio casero os haga una serie de consideraciones.
Por ejemplo: acude al médico siempre que tengas otros problemas de salud, que tengas problemas en tu sistema inmunitario por alguna cuestión, que sufras diabetes, que sufras de problemas de cicatrización, problemas relacionados con la coagulación de la sangre, si estás embarazada, en el caso de los niños, o en el caso de que, cuando apliques un remedio casero durante tres o cuatro días y veas que no te funciona.
Vamos a poner mucho sentido común y vamos a acudir al médico en todos los casos que sea necesario.
A pesar de eso, a veces, no tenemos acceso en ese momento al médico, o porque estamos fuera, o por mil razones. O sencillamente queremos tratarlo con remedios naturales. En esos casos, y siempre que tu salud sea buena, vamos a utilizar un remedio como el que os voy a dar.
Venga, pues ya os explico el método y vais a ver que es super fácil. Mirad: lo que vamos a hacer es tomar un balde lo suficientemente grande como para que quepan nuestros pies pero lo suficientemente pequeño para que no se vaya a extender mucho el enjuague que vamos a hacer.
En primer lugar un puñado de sal. Después vamos a poner medio litro o un poco más de agua. La justa para que nos cubra la planta de los pies y los dedos del pie. El agua bien caliente, todo lo caliente que podáis aguantar. Sobre esto vamos a poner medio vaso grande de vinagre, vinagre de vino o de manzana, resulta indiferente. El vinagre sabéis que es bactericida y anti micótico, anti hongos, entonces nos va a ayudar a ir limpiando el tema de los hongos. Vamos a poner también un tapón, pero solo un tapón de cloro, que sabéis que también es bueno para los hongos, para las bacterias etc.
Vamos a meter los pies aquí entre 10 y 20 minutos, todo el tiempo que podamos. Una vez que ya los hemos metido nos secamos los pies muy bien: pensad que la humedad es lo mejor para los hongos así que los secamos muy, muy bien: entre los dedos, alrededor de las uñas… perfectamente bien. Vamos a empezar siempre por las zonas que no están afectadas y terminamos por la zona afectada, a fin de no extender la infección. Si hace falta, si vemos que no somos capaces de secar perfectamente vamos a utilizar el secador del pelo.
Una vez que esto está hecho, tomamos un poquito de miel y con un pincel lo vamos a extender. Lo vamos a extender por todas las zonas, generalmente es por la parte de debajo de los dedos, por entre los dedos, alrededor de las uñas… por todo. Vamos a extenderlo muy bien. La miel es un fungicída increíble, donde hay miel no hay hongos. Os lo aseguro.
Una vez que esto está hecho, nos vamos a poner unos calcetines y vamos a dormir toda la noche con esos calcetines puestos para que ni manchemos ni se nos vaya la miel del pie. Por la mañana nos volvemos a lavar los pies, los secamos otra vez como hemos dicho antes: súper secos. La humedad es lo peor para los hongos. Los vamos a secar muy bien, muy bien, nos vamos a poner un calzado abierto como unas sandalias, o algo abierto para que le dé el aire al pie, o bien un calzado de piel, que transpire. Nunca plástico, nunca zapatillas de deporte.
Por favor, las zapatillas deportivas con los hongos es como ponerlos en una incubadora. Si nos tenemos que poner un calzado que cubre el pie que sea de piel, que sea transpirable y unos calcetines de fibras naturales: algodón, lana… que absorba cualquier exceso de sudoración.
Esto lo vamos a poder hacer todas las noches durante cinco o seis días. Os recuerdo lo de antes: cada cuerpo es un mundo. Si tienes una resistencia muy grande y ves que en cinco o seis días no se ha mejorado acude a tu médico, pero yo te aseguro que a la inmensa mayoría de los casos este remedio funciona muy bien.
Recuerda: agua, sal, vinagre, cloro, lo secamos todo muy bien impregnamos el pie en miel… calcetines, toda la noche así y por la mañana lavamos el pie, lo volvemos a secar muy bien y por favor: no utilices calzado que favorezca que los hongos sigan ahí.
Espero que te sirva. Y si crees que puede servirle a alguien más, compártelo en tus redes sociales.